En muchos sentidos, los rellenos faciales han provocado una pequeña revolución en el mundo de los procedimientos estéticos profesionales. Si bien con el paso de las décadas se han consolidado, de forma lenta pero segura, como el método principal para el realce de los rasgos faciales, relegando a un segundo plano muchos procedimientos que antes se realizaban con cirugía plástica, no fue hasta que los rellenos de ácido hialurónico ganaron popularidad que se produjo el gran cambio. Se trata de un cambio radical en el mercado de la belleza, algo perfectamente comprensible: un relleno de pómulos ofrece el mismo resultado, o incluso mejor, que un procedimiento quirúrgico, por una fracción del precio y con resultados fácilmente reversibles.

Siendo francos, en cuanto a tratamientos antienvejecimiento, el uso de rellenos de AH ofrece un mejor control, requiere mucho menos compromiso por parte de la persona que se somete al procedimiento y es mucho más seguro, ya que es mínimamente invasivo. Una amplia selección de rellenos, tanto en marcas como en tipos, ofrece a dermatólogos y otros profesionales colegiados una gama de herramientas para brindar servicios de rejuvenecimiento facial y aumento de rasgos altamente efectivos.

Diferentes tipos de rellenos para mejillas

Antes de explicar cómo se utilizan los rellenos densos para realizar el aumento de pómulos o el contorno de los pómulos, vale la pena repasar rápidamente los principales tipos de rellenos faciales que se utilizan hoy en día:

  • Suave Como su nombre indica, se trata de un gel hialurónico de baja densidad. Su objetivo es ofrecer máxima fluidez y un relleno eficaz y natural de arrugas pequeñas, delicadas y superficiales en la superficie de la piel. Generalmente, son de menor duración y no son eficaces cuando se requiere un gran volumen.
  • Medio – Gel de AH, un producto intermedio, que no es ni demasiado espeso ni demasiado blando. Este tipo de relleno se utiliza principalmente en la medicina estética para el tratamiento del tercio medio facial: surcos nasolabiales, labios y líneas de marioneta. Ofrecen un buen equilibrio entre la estabilidad del gel, la resistencia a las enzimas corporales y la voluminización, a la vez que son lo suficientemente suaves como para no formar protuberancias y adaptarse naturalmente al movimiento muscular del rostro.
  • Denso Estos son los rellenos faciales con mayor viscoelasticidad y menor fluidez. Estos rellenos están diseñados para permanecer prácticamente en su lugar, lo que los hace ideales para rellenar los pliegues cutáneos más pronunciados, lograr un efecto lifting de pómulos o, como en este caso específico, para contornear, moldear y realzar los rasgos faciales según el efecto deseado por el paciente.

Los rellenos de pómulos y mejillas se clasifican naturalmente en esta última categoría. En cuanto a sus variantes, el tipo más común se basa en ácido hialurónico. Como base, ofrece la solución más versátil y el mayor control del efecto de liberación, una vez que el relleno se utiliza como parte de tratamientos antienvejecimiento. Los rellenos de pómulos a base de ácido hialurónico (AH) son métodos temporales de rejuvenecimiento facial. Su efecto dura hasta aproximadamente un año y medio y se disuelven fácilmente con enzimas hialurónicas.

Por otro lado, los llamados rellenos semipermanentes duran aproximadamente el doble. Normalmente se basan en ácido poli-L-láctico, policaprolactona o calcio. Si bien son excelentes para dar volumen, no son tan fáciles de quitar, por lo que si la persona no está contenta con el resultado, sería más difícil corregirlos.

El procedimiento de relleno de mejillas

Una parte principal del atractivo de los rellenos de marcas como Revolax, Dermalax o Relleno resplandeciente, como alternativa a la cirugía plástica, son la seguridad y la comodidad. Hace un par de décadas, una persona que quisiera tener pómulos más pronunciados o recuperar el volumen perdido en las mejillas tendría que someterse a una cirugía real. Caro, invasivo y con un tiempo de inactividad obligatorio, este antiguo método es rechazado por mucha gente hoy en día. Por el contrario, el uso de un relleno facial espeso y contorneador es un proceso de 20 a 30 minutos, en el que el gel denso se aplica a la capa subcutánea de la piel, ofreciendo una voluminización inmediata, con riesgos mínimos o nulos. Inmediatamente, una vez que el dermatólogo o el médico autorizado terminan de esculpir los pómulos, la persona puede continuar con su rutina diaria.

Maximizar los beneficios de los rellenos para mejillas

Este tipo de aumento facial no es permanente, como se mencionó. Para obtener los mejores resultados, debe optar por un producto de una marca reconocida, como el coreano Neuramis o alguna de las ofertas premium de Restylane y TeosyalA continuación, debe asegurarse de que la persona que realice el procedimiento de relleno facial cuente con la licencia y la capacitación necesarias, y tenga buenas opiniones de otros clientes. Asegúrese de seguir sus instrucciones al pie de la letra. Se recomienda realizar retoques de vez en cuando para mantener los resultados obtenidos.

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